Hay pueblos blancos increibles, con construcciones típicas, apenas se ven edificios altos, cuestión muy agradable para la vista y el medio.me llamó poderosamente la atención Fornel, pueblo marinero,no solo por su belleza y su caldereta de langosta,sino tambien porque tenia un paseo marítimo donde la gente se bañaba, pero totalmente acondicionado para ello ,con escalerillas como de piscinas para salir del agua, además una serie de bancos en la sombra ,ah! tambien habia en el suelo una serie de agujeros para poner las sombrillas.
de las calas mejor no os hablo son realmente increibles, aqui teneis una muestra.
¡Hala, con caldereta de langosta y todo, eh! ¡Qué bien os cuidais, amiga!
ResponderEliminarMe alegro un montón de ese viaje que tiene que haber sido maravilloso...
Un beso.